Roberto Palazuelos asegura que las acusaciones contra su hotel son exageradas

Ciudad de México.- Roberto Palazuelos volvió a colocarse en el centro de la conversación pública luego de que trascendiera que las autoridades suspendieron actividades en su hotel Diamante K, ubicado en la zona hotelera de Tulum. El empresario, actor y figura mediática salió a defenderse ante los señalamientos que lo han puesto 'en el ojo del huracán', como él mismo reconoce.

"Bueno, yo creo que hay una exageración, porque me metieron a un rollo de todo mundo, pero yo el único problema que tuve es que no tenía mililitros el menú y que las camaristas dejaban unos sobres de propina y yo no sabía que eso era ilegal, pero es más exageración que lo que es en realidad", afirmó.

La suspensión ocurrió en un momento complejo para la industria turística de Tulum. En los últimos meses, el destino ha enfrentado una desaceleración de visitantes, atribuida tanto a la percepción de precios elevados como a la saturación del mercado y a las nuevas regulaciones en materia ambiental y comercial. Estas medidas han derivado en inspecciones más estrictas a hoteles, restaurantes y prestadores de servicios.

Entre los aspectos señalados por las autoridades se encuentran los costos de hospedaje, la correcta presentación de los menús y la transparencia en el cobro de servicios adicionales. En el caso de Diamante K, Palazuelos sostiene que las observaciones a su negocio no corresponden a violaciones graves, sino a detalles administrativos que, según él, han sido sobredimensionados por su presencia mediática.

De acuerdo con el empresario, parte del reporte oficial mencionaba elementos que, asegura, no representan irregularidades de su destino turístico. Palazuelos insiste en que su establecimiento fue incluido en una lista que originalmente abarcaba a distintos hoteles con prácticas diversas, lo que habría provocado una interpretación equivocada de la situación.

En su declaración, enfatizó que muchas de las situaciones atribuidas a su negocio no corresponden a su operación. "Generalizaron. Generalizaron. Esos son problemas de otros hoteles, no míos, pero como yo soy el famoso, a mí me colgaron la nota. Hay actividades", expresó, subrayando que la visibilidad de su nombre suele amplificar cualquier señalamiento.

El llamado 'Diamante Negro' también recordó que, a lo largo de los años, su trayectoria empresarial en Tulum ha sido objeto tanto de reconocimiento como de controversia. La creciente regulación en la zona —motivada por la protección ambiental, la formalización de servicios y la defensa de los consumidores— ha llevado a revisiones constantes que impactan a todos los operadores turísticos, independientemente de su perfil público.

Por ahora, Palazuelos busca aclarar su situación mientras avanza el proceso administrativo correspondiente. Su caso se suma a un escenario más amplio en el que Tulum intenta equilibrar desarrollo económico, sostenibilidad y cumplimiento normativo, elementos que seguirán influyendo en la operación de hoteles y servicios turísticos en la región.

Fuente: Puro Show / Agencia México